• Nuevas modalidades terapéuticas ayudan a dar respuestas más amplias a las enfermedades graves o con necesidades de tratamientos no cubiertos aún.

En la actualidad, gracias a la ciencia y sus desarrollos tecnológicos, se convierte en un hito hablar de cuatro tipos de herramientas terapéuticas como lo son de moléculas pequeñas o de síntesis, proteínas terapéuticas, anticuerpos monoclonales y proteínas de fusión.

Las moléculas pequeñas o de síntesis favorecen a los pacientes gracias los compuestos químicos, que pueden atravesar la pared celular y acoplarse a sus receptores en el interior de la célula. Asimismo, por su tamaño están diseñados para ajustarse a receptores objetivos relacionados con enfermedades neurológicas.

Las proteínas terapéuticas pueden utilizarse para sustituir a una proteína alterada o deficitaria en una enfermedad específica. También pueden utilizarse para asegurar el suministro de una proteína beneficiosa para el cuerpo, con la finalidad de disminuir el impacto de la enfermedad o la quimioterapia.

Los anticuerpos naturales actúan como uno de los principales guardianes del sistema inmune. Estas moléculas grandes en forma de Y contienen dos dominios variables, diseñados para reconocer y unirse a antígenos específicos considerados una amenaza para el cuerpo humano. El antígeno contra el que se dirigen puede ser una proteína de un patógeno o un marcador proteico presente en células malignas o infectadas.

Y finalmente las proteínas de fusión, son el resultado del diseño de moléculas que contengan genes o fragmentos de genes que codifican las proteínas las cuales actúan como punto de unión señuelo que atrae y atrapa moléculas que, cuando son libres, contribuyen al desarrollo de la enfermedad.

Amgem(2023) Tomado de https://www.amgen.es/nuestra-ciencia/modalidades-terapeuticas#