“Aliadas Somos Más y Mejores”: Tercer webinar de Mpodera desarrolló el concepto de Sororidad
Bogotá, octubre de 2020. La sororidad, este concepto que define la hermandad y solidaridad entre mujeres para crear redes de apoyo que impulsen la equidad, fue el tema del tercer evento virtual del movimiento Mpodera, en el que participaron mujeres líderes del sector salud como Claudia Varela, gerente de Biomarín; Ángela María Cruz, Gerente COOMEVA EPS; Florencia Davel, Gerente General para América Latina de Bristol Myers Squibb y Lizbeth Acuña, directora de la Cuenta de Alto Costo.
Con el título “Aliadas Somos Más y Mejores”, este webinar se centró en explicar en qué consiste la sororidad y cómo se presenta en escenarios reales, desde la perspectiva y experiencia de las participantes. Para Claudia Varela, la sororidad consiste en una colaboración femenina, en la que no hay rivalidad de ningún tipo, sino un apoyo constante para el crecimiento y desarrollo personal, laboral o familiar.
Y es precisamente la rivalidad y la competencia entre las mujeres lo que retrasa la lucha por la equidad y acentúa los esquemas y paradigmas de género. “Los chismes, juicios, o comparaciones entre nosotras son cosas que afectan la unidad entre mujeres, y esto se ve mucho en diferentes escenarios, cuando lo que debemos hacer es amplificar nuestras voces y ayudarnos a crecer”, precisó Valera.
Florencia Davel insistió en la capacidad transformadora de las redes de mujeres y conexiones de valor. “Para fortalecer los lazos entre nosotras hay que priorizar espacios donde generemos conexiones con mujeres que se desempeñen en otros sectores o que puedan aportar cosas diferentes a nuestro desarrollo y crecimiento. Espacios de participación donde podamos tejer redes que nos impulsen y potencien, como es el caso de Mpodera”, agregó.
Según Lizbeth Acuña, es fundamental que desde la esfera familiar se empiece a desarrollar el concepto de sororidad y que se eduque a niños y niñas sobre el tema. “Puede ocurrir que desde las familias se lancen muchos juicios y comparaciones entre las mujeres. En mi caso, me comparaban constantemente con una prima, para ver quién se desempeñaba mejor en ciertas cosas. La sororidad implica dejar a un lado la competencia y ser más amables, empáticas, y tener un conocimiento pleno de nosotras mismas, para ayudar a otras.”
Finalmente, Ángela María Cruz destacó, desde su experiencia liderando COOMEVA EPS, que es importante generar espacios equitativos en las organizaciones, donde los hombres también participen en la discusión de igualdad, pues estos también juegan un rol fundamental en la promoción de una cultura de equidad.
“Los hombres deben tener un papel activo en temas de igualdad. Es importante un trabajo en equipo entre hombres y mujeres, pues debemos conocer los aspectos que nos diferencian de ellos, para complementarnos en el ejercicio laboral”, señaló Cruz.